jueves, 21 de julio de 2016

Isla Tres Bocas


Diálogo con Nahuel, de 8 años, en la escuela Nº12 del Delta de Tigre,  en el Festival de Poesía en la Escuela.

Pregunté:
-Y dónde está la poesía?
-En los libros.
-Y antes de los libros?
-En las palabras.
-Y antes de las palabras?
-En la cabeza.
-Y antes de la cabeza?
-En el pecho.


(Agosto 2014)

Mina Nueva Esperanza



"Lo que pasa es que la Pachamama no quiere a las mujeres, porque como ella es mujer, hay celos entre ellas. La Pachamama quiere y protege a los hombres. Por eso los hombres trabajan en las minas, porque la Pacha los cuida. A las mujeres no. Las mujeres no pueden entrar en la mina salvo una vez al año, cuando la Pacha las deja." Así nos dijo el guía que nos acompañó en la visita a la mina de oro La Nueva Esperanza, en La Carolina,  San Luis. Y yo pensé, ay, mi Dios, por qué no avisan antes, qué hacemos ahora, adentro de la mina, mi hija y yo, con la mirada puesta sobres estas vetas celestes e inolvidables.


(Enero 2016)

miércoles, 20 de julio de 2016

Conurbano bonaerense


Acaso lo más surrealista de hoy haya sido la vuelta a casa en colectivo desde San Martín hasta Muñiz, conurbano bonaerense,  un viaje de una hora, leyendo a Olga Orozco, y ver a cuatro mujeres viejas -segundo, cuarto asiento, dos de a pie pero agarradas con sus manos gruesas al pasamanos-, iguales a Olga Orozco, con sus rulos cerrados, las marcas en la cara de haber vivido mucho, las bocas con sus gestos entre generosos y despectivos -todas las mismas bocas, el mismo mundo-, mirándome leer como si no importara.


(septiembre 2015)



Entre Merlo y Córdoba




Lo que sí me compré en el límite entre Merlo y Córdoba fueron platos. Seis platos celestes, en "Fermín", una cooperativa que nuclea a artesanos ceramistas de la región de traslasierra. Cada plato está firmado por su artesano. "Fermín" está en el camino de los pueblos que van desde Yacanto (Córdoba) a Merlo (San Luis), en una esquina, en una casona recuperada del año 1800. Como la casona es toda de adobe, para hacerte el postnet de la tarjeta de crédito ponen una silla a la intemperie y ahí facturan, porque el adobe no deja entrar la señal de wifi. El adobe es sabio, como los viejos.



(Enero 2015)


Mar del Plata


Recuerdo cuando era niña y mi papá manejaba un Fiat 128. Íbamos a algún lado. A veces pienso que era a Mar del Plata, porque era un viaje largo y, además, nosotros nunca salíamos de paseo. Salvo en febrero, que íbamos a Mar del Plata. Lo único que recuerdo era que de pronto en un lugar donde no había nada aparecían filas de álamos. Una línea verde contra el viento. Eso decía mi papá, que se plantaban los álamos para atajar al viento. Que me fijara, decía, que siempre que había una fila de álamos había una casa. Desde hace años, cada vez que paso por una fila de álamos, cualquiera sea el destino, confirmo que más lejos o más cerca hay una casa. Y siempre es la misma casa que yo veía cuando iba en el Fiat 128 de mi papá.



(Diciembre 2014)


Santiago del Estero

En los enero de Santiago, de los cables de luz cuelgan pelucas marrones. Son unos pelucones tejidos, suspendidos a cielo abierto. Los pelos no se mueven con el viento porque no hay viento en Santiago del Estero cuando pica el verano. Ya de vuelta en Muñiz, pregunté. Silvia, santiagueña, me dijo que son nidos de calas o de catas. Mi memoria se llenó de pájaros.

(Enero 2012)



Subiendo la cuesta, en Tafí del Valle,  una nube se nos metió en el auto. Por instinto, cerramos las ventanillas y la nube nos quedó adentro. Viajamos con la nube un rato largo, ciegos, porque no podíamos detenernos.  Tragamos nube. Abrimos las manos y tocamos nube. La vida es un misterio.


Amaicha del Valle


Y de Amaicha del Valle, mañana, me voy a acordar de las copleras. Me voy a acordar otra vez que no las vi bajando el cerro. Que no las oí cantando, porque no coincidimos bajo el cielo de colores. Mañana me voy a acordar otra vez por qué tengo que volver a Amaicha del Valle.


(Junio 2014)


Belén



Hoy me acordaba de la ruta del telar, en Catamarca. Del telar de la familia Saracho, en Belén. De que me traje una pashmina color verde loro. Tiene un tramado parecido a una venda, vista a través de una lupa. Belén es un pueblito que queda al lado de Londres. En Londres se consiguen nueces en casi todas las casas. En la casa donde compramos las nueces tenían tres nogales, los ví porque nos invitaron a pasar al fondo, para conocerlos. Después volvimos a Belén, comiendo nueces en el auto. 




(Junio 2014)